¿Qué es la tendinitis? Conozca las causas y tratamientos
Su salud
Nuestro cuerpo está formado por más de 4.000 tendones. Gracias a estos tejidos, podemos doblar el brazo, encoger las piernas o sujetar una raqueta para jugar al tenis. En ocasiones, los tendones se inflaman, ocasionando dolor cuando rozan los huesos. A esa inflamación se la denomina tendinitis.
¿Por qué sucede esto? Las causas son numerosas y algunas no podemos evitarlas. Es el caso, por ejemplo, de la inflamación del tendón que se produce por la edad. Los tendones también envejecen y cuando nos hacemos mayores, ya no son tan elásticos ni pueden soportar tanta carga como antes.
¿Por qué se produce una tendinitis?
Se calcula que en torno al 60% o el 70% de la población sufrirá tendinitis alguna vez en su vida, por lo que se trata de una inflamación muy común. Los movimientos repetitivos, una lesión muscular, una sobrecarga, tirar o empujar con más fuerza de la debida, ciertas enfermedades como la artritis reumatoide o la diabetes e, incluso, el estrés, pueden provocar tendinitis.
Normalmente, las articulaciones que más se resienten son las muñecas, las rodillas, los hombros, los codos, los talones y los tobillos. Por eso hay determinados profesionales que padecen tendinitis con más frecuencia. Es el caso de los pianistas o de los carpinteros, por ejemplo.
Aunque, realmente, cualquier trabajador cuya actividad implique realizar movimientos repetitivos, adoptar posiciones incómodas, levantar peso o soportar vibraciones, tiene más riesgo de sufrir una tendinitis.
Lo mismo sucede con las personas que practican determinados deportes. Tenis, natación, golf, running, baloncesto, bolos o béisbol, por ejemplo.
Seguro que has oído hablar de términos como “codo de tenista” (epicondilitis lateral), “codo de golfista” (epicondilitis medial) “hombro de nadador” o “rodilla de saltador”. Pues bien, todos estos problemas están relacionados con una tendinitis.
Otros tipos de tendinitis son la del manguito de los rotadores, la aquílea, la rotuliana, la Tenosinovitis de DeQuervain o el pulgar en resorte.
Cómo prevenir una tendinitis
Lo mejor para reducir el riesgo de que los tendones se inflamen es mantenerse activo y realizar ejercicios orientados a que las articulaciones no pierdan la flexibilidad. Otros consejos que usted puede tener en cuenta son los siguientes:
- Calentar siempre antes de realizar cualquier práctica deportiva.
- Si al hacer un ejercicio o movimiento nota dolor, debe parar y descansar para relajar la zona.
- Combinar los ejercicios de carga por impacto (correr) con otros más suaves (caminar).
- Ejercitar todos los grupos musculares.
- Mantener el cuerpo hidratado.
- Debe asegurarse de que la técnica empleada al realizar un ejercicio es la adecuada. De lo contrario, podría lesionarse.
- Cuando acabe de realizar los ejercicios deportivos, tiene que tomarse un tiempo para estirar.
- En el trabajo, debe adoptar todas las medidas ergonómicas recomendadas.
¿Existe tratamiento para la tendinitis?
En principio, sufrir una tendinitis no trae mayores consecuencias. Basta con guardar reposo unos días y desaparece. El problema está en si el mismo tendón se inflama de forma recurrente, pues puede llegar a producirse un desgarro que obligue al paciente a pasar por el quirófano.
¿Tiene hinchada alguna articulación y el dolor se agudiza al realizar un determinado movimiento? ¿La piel que cubre el tendón está enrojecida y caliente? El médico es el que puede decirle si sufre una tendinitis, pues los síntomas en ocasiones son similares a los de la artritis. Si se confirma el diagnóstico, le indicará el tratamiento a seguir.
Lo primero es bajar la inflamación, y para ello suele recetarse un antiinflamatorio. En ocasiones puede ser necesario inyectar esteroides. Una rehabilitación a base de ejercicios suaves también ayuda a reforzar los tendones, aunque antes será necesario dejar que la zona afectada descanse.
A parte de la rotura de la que ya hemos hablado, entre las complicaciones que pueden derivar de una tendinitis mal curada encontramos la tendinosis. Se trata de una enfermedad degenerativa del tendón que puede acompañarse de un crecimiento de vasos sanguíneos nuevos que no es normal.
Fuentes (consultadas el 10 de abril de 2020): Arthritis Fundation, NIH, Clínica Mayo.
Es importante tener en cuenta que esta información es solo para fines de información general. No constituye un consejo personal o una recomendación para ninguna persona o empresa de ningún producto o servicio.